Anapo insiste en “plena liberación” de las exportaciones de soya

UNA GIGANTESCA COSECHADORA EN UNA DE LAS HACIENDAS DEL NORTE INTEGRADO.

La banda de precios y las licencias de exportación de soya aplicadas a la producción y exportación del grano han sido calificadas de “perjudiciales” para la cadena productiva, pero principalmente al productor porque los costos que significan estas restricciones se han trasladado a los precios pagados a éstos por la entrega del grano. La Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) insiste en la plena liberación de las exportaciones, según lo señalaron por separado el expresidente de la entidad, Reynaldo Díaz, y el titular en funciones, Demetrio Pérez.

El Gobierno, en el marco de su política de asegurar el abastecimiento del mercado interno a precio justo, aprobó los decretos 29524 y 0725 en abril de 2008 y diciembre del 2010, respectivamente que establecen la incorporación del sistema de bandas de precios para la otorgación de los permisos de exportación. El Gobierno, a través del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural, ha justificado las restricciones señalando que se adecúan a la Constitución que prioriza el abastecimiento del mercado interno sobre el externo. “Esta es una demanda de varios años y creemos que si el abastecimiento interno de la soya está garantizado, no vemos razonablemente ninguna justificación para impedir la libre exportación de los excedentes a los mercados internacionales”, señaló Díaz.

DESESPERACIÓN

De acuerdo con la Memoria 2012 de Anapo, “las restricciones a las exportaciones ocasionaron que en la campaña agrícola de verano 2011/2012, los silos de almacenaje se encuentren repletos de granos de campañas anteriores, que no pudieron exportarse, generando la falta de espacio para recibir el grano de la nueva cosecha y la desesperación de los agricultores de no poder entregar su producción, debiendo aceptar precios inferiores al correcto”. Al respecto, Díaz precisó que al presente este problema ha sido superado. Por su parte, el presidente de la Asociación sostuvo que “ante la permanencia de las restricciones se hicieron las gestiones correspondientes con el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, como cabeza de sector, para que lo antes posible, sean liberadas las exportaciones de grano de soya, como una medida de emergencia para liberar los espacios en los silos de almacenaje”.

EXCEPCIÓN

El Gobierno, mediante el decreto 1283 de julio de 2012, estableció que se exceptúa temporal y excepcionalmente la presentación del Certificado de Abastecimiento Interno y Precio Justo, como requisito previo para la exportación de hasta 300 mil toneladas de grano de soya. Pérez al respecto dice que “si bien esta medida ha sido importante para coadyuvar en la liberación de espacio de los silos de almacenaje y para ayudar a transparentar la formación de precios, la posición institucional ha sido firme de continuar solicitando la liberación plena de las exportaciones de granos, para que los agricultores puedan contar con una mayor cantidad de compradores”. Estas declaraciones son parte del documento de Anapo y que forman parte del informe de Pérez.

SEGURO AGRÍCOLA

El expresidente de la Anapo dijo que en ocasión de la visita de las autoridades de Gobierno a Santa Cruz se abordará el tema del seguro agrícola para la producción de oleaginosas. “Tenemos la seguridad de que el Gobierno tomará en cuenta esta demanda”, sostuvo Díaz. Por su parte, la presidenta de la Federación Nacional de Cooperativas Arroceras (Fenca), Salomé Tupa, manifestó que este sector también requiere del seguro agrícola “Pachamama”, aunque advirtió que el mismo tendría que ser modificado por el Gobierno, dado que los productores del cereal utilizan en promedio extensiones de 4 o más hectáreas. La gerente de la entidad, Ana Ortiz, sostuvo que el sector perdió la producción de unas 3.000 toneladas a consecuencia de las inundaciones que afectan al Norte Integrado en el departamento de Santa Cruz.

Ortiz manifestó que en el presente período agrícola se cultivó el 80 por ciento de la superficie de 120 mil hectáreas sembradas con un rendimiento promedio por hectárea de 3 toneladas. Las cifras de rendimiento en la región señalan que 2 toneladas por hectárea es el indicador más bajo. Ortiz manifestó que pese a que otros sectores fueron afectados por las lluvias, sin embargo, contribuyeron a mejorar la productividad de los cultivos.

PERFIL INSTITUCIONAL

- La Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) fue fundada en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia) en mayo de 1974.

- Representa a más de 14 mil productores que ofertan en cada campaña (verano e invierno), miles de fuentes de trabajo y representan más del 25% del Producto Interno Bruto (PIB) del departamento Santa Cruz.

- Es uno de los eslabones fundamentales del sector agropecuario boliviano. De la producción de todos sus asociados depende gran parte de la cadena alimentaria de la industria cárnica, avícola y la industria aceitera en Bolivia.